Algunos consejos para evitar o disminuir la adicción relacionada al uso de los Blackberry:
- ¡Decide horarios! Prende tu teléfono en las mañanas y apágalo todas las noches. Si lo usas para trabajar, apenas terminen tus horas de trabajo deslígate de él. Recuerda: debe hacer un límite entre el trabajo y tu vida personal.
- Realiza actividades en la cuales el blackberry no esté presente. Realiza ejercicios o deportes; la natación, por ejemplo, es una gran opción para despegarte de él por un par de horas.
- ¡Desconéctate en pequeños lapsos de tiempo! Así podrás combatir la idea de que debes estar siempre disponible porque algo puede pasar. Eventualmente te darás cuenta de que nada malo sucedió.
- Cuando hagas tus tareas o trabajos no revises tu teléfono. Proponerse estar concentrado durante una actividad es importante para hacerlo mejor, así evitas caer en la tentación del facebook y además obtienes buenas calificaciones.
- ¡No envíes mensajes a tu hermano que se encuentra en la habitación de al lado! Es necesario mantener la comunicación tanto con los amigos como con la familia, el ambiente social se mantiene con el contacto no con la conexión.
- Cuando salgas déjalo en casa, no es necesario utilizar el teléfono si vas a salir a divertirte. O en todo caso apaga la conexión al internet y utilízalo solo para comunicarte en caso de alguna emergencia.
- Si no suena o vibra no lo revises constantemente. De esta manera disminuyes la ansiedad que se produce cuando esperas desesperadamente que alguien te envíe un correo o te escriba por bb msn, facebook, etc.
- Cuando estés con tu familia apágalo. No es necesario permanecer días como el domingo conectado a las redes sociales o resolviendo los problemas del trabajo.
- Distingue entre lo urgente, lo importante, lo informativo y lo entretenido. Algunas situaciones son más importantes, no olvides que las responsabilidades van primero; sin embargo, debe existir un límite entre aquellas que son del trabajo, ya que deben terminar los viernes y reiniciar los lunes.
- Piensa nuevamente lo que crees que tu móvil te ofrece. Puede darte muchas ventajas, pero si comienza a manejar tu vida: déjalo.
Fuente propia
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